jueves, 21 de febrero de 2008

Pottitis aguda.

Aggg.
Hace poco estuve en la Fnac para comprar unas pilas recargables. Este sitio siempre tiene gente, por supuesto, es enorme, tiene un cerro de ofertas y mucho donde elegir. Pero se podía andar por los pasillos y hasta había alguna caja vacía.
Hoy no. Como vivo en babia, se me ha ocurrido ir a ver precios de los cartuchos de mi flamante y nueva impresora-fotocopiadora-scanner regalada por los amiguitos más guapos y más majos que hay. Menos mal que sólo he ido a ver precios. Los he visto, y he huído. Bueno, no, no he huído a la primera de cambio. He subido a curiosear. Y es que a las 18.30 comenzaba la venta del último libro de Harry Potter en español. Madre mía, la que había montada. Cámaras de televisión y fotógrafos por todas partes, mogollón -pero mogollón- de gente disfrazada de mago, profesor de magia y otras guarreridas británicas similares y/o repugnantes, porque en el Forum había una presentación y debían regalar algo al que más se pareciera a los personajes, o algo así. Trrremebundo. En las cajas había dos colas... para hacer cola. Es decir, a lo largo del pasillo había dos colas enorrrmes que sólo servían para llegar a las cajas y hacer cola en la que te tocara (había una simpática "azafata" colocando a la gente... vamos, tirándose de los pelos mientras intentaba que nadie le sacara un ojo con una varita mágica y aguantando avasalles varios de las típicas señoras maduras, tipo "es que yo sólo venía a..."). Había gente que se los llevaba de 5 en 5, y en algunos sitios era mejor darse la vuelta (sólo que en la Fnac no te puedes dar la vuelta: o te aborregas por donde te tienes que aborregar, o no sales)
Más quisieran muchísimos escritores, cantantes, directores de cine...
El caso es que me gusta Harry Potter, pero las pelis. Tengo las 5 que han salido en su edición especial, para poder jubá como los niños pequeños. Soy así, qué le voy a hacer: me gusta la magia (no la de sacar cosas de las chisteras) y me parece que esta serie tiene mucha, no sólo de abrir puertas con la varita, sino de abrir la imaginación, la fantasía, la emoción, con mucho estilo. Pero no me he comprado ninguno de los libros. Ni siquiera los he leído prestados. Siempre he pensado que como cada uno tiene tochocientas páginas debían ser caritos, pero éste sólo cuesta 21 €. Así que me decidí por las pelis, que me molaron muchísimo en cine. Además, prefiero no desvelarme los finales leyéndolos. Quizá cuando sea mayor y ya tenga todos los dividís me tire a por los libros (glups... ¿unas... 5.000 páginas? Bueno, con paciencia)
Total, que he flipado muchísimo.

2 comentarios:

A. dijo...

Te confesaré que yo ya lo tengo, me lo ha traido mi chico del circo de lectores a la oficina a las 11 y me dice que lo guarde, que como hasta por la tarde no sale a la venta que no se lo enseñe a nadie hasta por la tarde.
Te podría decir qe lo hago por mis peques, pero soy yo el que se termina leyendo el libro.

MadRod dijo...

jejeje estos adultos...