lunes, 21 de mayo de 2007

Publicidad emocional.

Es posible que ya nada nos entre en la cabeza si no es a través de la imagen. No sólo éso, sino que además estamos tan inundados de imágenes que empiezan a no impresionarnos, a no llamar nuestra atención, a perder el mensaje que pretendían tener.

He aquí unas imágenes con mensaje. Me reconozco tirando la colilla en cualquier sitio, y se me ha hecho un nudo en la garganta con la última imagen, como espero que le pase a todo el que lo vea.

Habría que preguntarse por qué es necesario llegar a verlo en un anuncio de televisión para pensar en ello, para caer en la cuenta de las responsabilidades que tenemos y que ya no queremos asumir, para ver, claramente, lo poco que nos importan todos y todo.

Simón dice: a veces me avergüenzo de mí mismo.

4 comentarios:

Isi dijo...

Ya sé que soy muy cansina, pero no puedo verlo....snif, snif....

MadRod dijo...

Bueno, mejor que lo veas en casa ;) Te deja un poco... así, mal.

Anónimo dijo...

puff, si, puff, que fuerte, coño!!

No sé si alguna vez estaré preparada para tner hijos, que gran responsabilidad, joer y que importante tener cuidado con lo que uno hace y ellos ven. Es cierto.

Snif, snif...el final realmente te encoje el alma. Aunque el anuncio entero lo hace, madre mía!!

Besos,corazón!!

MadRod dijo...

Bueno, supongo que de éso se trataba, de hacerte recapacitar en cuanto a prioridades, sobre todo. Hoy en día la gente le da mucha más importancia a su vida personal (su trabajo, su vida social, su tiempo libre) que a educar a sus hijos, y se nota cada vez más. Puede que cada día sean más inteligentes por la cantidad de información que reciben, pero no deberían recibir gran parte de esa información... Y nosotros aquí, tan panchos.