Fallas.

Por fin en Fallas otra vez.

Nunca he estado en las Fallas, y me encantaría. Me gusta que se guarden ciertas tradiciones, tan nuestras, tan disfrutables y divertidas, que representan tanto sobre nuestra cultura y personalidad.

Creo que hay pocos países en el mundo que puedan disfrutar de tantas y tan variadas fiestas y representaciones de su propia idiosincrasia como el nuestro. ¡Disfrutémoslo! O al menos, dejemos que los demás lo disfruten, si no es lo nuestro...

Aquí os dejo el ninot indultat de este año, y el ninot indultat infantil. Dos gozadas que se salvan de la quema y que quedarán ahí para siempre, para recordarnos que no todo desaparece, que no todos los malos espíritus se pueden espantar a base de fuego, que la primavera no puede con todo... pero que no todo lo anterior debe desaparecer, que puede quedar ahí buena parte para recordarnos lo bien hecho.